Valores

La etimología de la palabra valor viene del latín valere que significa “ser fuerte”; y los valores son “fuertes principios que le permiten a los seres humanos, mediante su comportamiento, realizarse como mejores personas, son aquellas cualidades, virtudes, o características de una persona que se consideran típicamente positivas o de gran importancia por un grupo social”. Sin duda, los valores orientan nuestro comportamiento, son también creencias que nos ayudan a preferir o elegir unas cosas en lugar de otras o un comportamiento en lugar de otro. Una persona no nace con valores predefinidos, estos se desarrollan en el transcurso de nuestra infancia y los padres somos los primeros modelos valóricos de nuestros hijos, por ello nuestra responsabilidad es grande como “rol models”, en especial en los primeros años de formación; la educación con base en valores es fundamental y aquí la familia juega un rol preponderante, siendo la escuela y el colegio lugares donde luego se reforzaran estos principios.

La familia es el grupo social más antiguo y universal de todos, siempre ha existido y, por ende, es la base fundamental de la sociedad. Es lo más importante que tiene el ser humano, son los cimientos mismos de su estructura, su razón de ser, son la motivación para su desarrollo. En estos 12 años como CEO (Chief Executive Officer), de los cuales 10 he tenido que estar fuera de mi país, gran parte de lo que he logrado se lo debo a mi familia, a la educación valórica de mis padres, al apoyo constante de mi esposa, a la resiliencia casi infinita de nuestro grupo familiar, que hoy han dado frutos estupendos; aunque también hubo algunos costos en el camino, ya que nada en la vida es gratis, pero sinceramente valió la pena el esfuerzo.

“En una organización los valores son el marco del comportamiento que deben tener sus integrantes y dependen de la razón de ser de la misma”

Existe una gran lista de valores, entre los más preponderantes: respeto, amor, libertad, justicia, tolerancia, equidad, paz, honestidad, educación, responsabilidad, lealtad, sinceridad, ética, confianza, honor, lealtad, amistad, etc . Considero que cada persona tiene una escala valórica desarrollada que lo define y esta es única, a esa escala valórica la denomino, “código de barras personal”; así como en el supermercado cada producto tiene su código de barras, donde se encuentra almacenada toda la información del mismo, “ código de barras personal” define quién eres en términos valóricos.

Te reto a hacer una prueba, reúne a 10 personas de manera aleatoria y pídeles que escriban en orden de prelación 10 valores con los que se encuentran plenamente identificados, poniendo en primera posición al valor más importante que ellos consideran los define y caracteriza por sobre todos y en décima posición al último en prelación, pero no por ello menos importante, será muy difícil que 2 personas coincidan exactamente en esa escala valórica, ya que cada persona es única, cuando hablamos de valores, no solo en su prelación sino en la intensidad en que estos se encuentran presentes.

Así como en la familia, sus valores definen a sus miembros; en una organización los valores son el marco del comportamiento que deben tener sus integrantes y dependen de la razón de ser de la misma, del propósito para el cual fue creada y de su proyección al futuro (la visión). ¿Por qué es importante conocer “el código de barras personal” de tu organización y en particular de tu equipo? Porque de esa manera podrás entender mejor qué motiva a tu empresa y a cada uno de sus miembros, a qué le dan más valor, encontrar puntos de coincidencia y entender las diferencias que finalmente te permitan encontrar el mejor camino para liderarlos y poder juntarlos a trabajar en equipo de acuerdo a su afinidad o cercanía valórica.

Define tu código de barras personal y la de los miembros de tu equipo y descubre la escala valórica que motiva y moldea su comportamiento, de seguro encontrarás muchas respuestas a tus interrogantes en el campo de liderazgo y manejo de equipos. En mi caso, el honor y la honestidad van a la cabeza y son mi esencia, la responsabilidad y la lealtad son la base que regula mis actos, el respeto y educación regulan mi relacionamiento, la transparencia, gratitud, humildad definen mi espíritu; esto no quiere decir que otros valores no estén presentes, o no sean importantes, sino que los mencionados anteriormente son para mí los más preponderantes y definen mi personalidad. Una base valórica sólida sin lugar a dudas es una de las claves para desarrollar tu liderazgo.

Por: Edwin Fernando Chávez Zavala

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